La carga puede ser levantada

 Libertad y Esperanza

¿Te sientes cansado? Quizás te encuentras abrumado por cargas pesadas, opresiones que te someten y yugo que te limita. Cuando vivimos bajo ese peso, es como estar en una prisión emocional y espiritual, incapaces de experimentar la verdadera libertad. Las preocupaciones diarias se convierten en esos pesos invisibles que nos impiden alzar las manos en señal de victoria. El yugo de la ansiedad y la tristeza nos doblega, oscureciendo la esperanza que está frente a nosotros.

Jesús nos recuerda que Él es el camino, la verdad y la vida (Juan 14:6). No te rindas ni caigas en el desaliento, pues aunque el cansancio parece decirnos que todo ha terminado, no es el final. Hay una promesa de libertad: la carga puede ser levantada y el yugo quebrado por la unción y el poder de Dios (Isaías 10:27). Él nos invita a descansar en Él: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar” (Mateo 11:28).

Es natural vivir con angustias, pero Jesús nos invita a entregarle nuestras cargas para que Él nos dé descanso. ¿Cómo? A través de la obediencia a Su Palabra. El consejo de Dios, escrito en las Escrituras, es la guía que necesitamos para liberarnos de esas preocupaciones que nos roban la fe y la capacidad de obedecer (Lucas 21:34). “Echa sobre Jehová tu carga y Él te sustentará” (Salmos 55:22).

Dios quiere detener ese ciclo de desesperación en tu vida y sostenerte. No sigas cargado con un estilo de vida que te ha convencido de que la opresión es normal. Abraza la libertad que Dios te ofrece. Recuerda la historia de Abraham, quien, aunque cargado de incertidumbre, subió al monte para adorar. Le dijo a sus siervos: “Esperad aquí con el asno, y yo y el muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros” (Génesis 22:5). Para recibir la bendición, debemos aprender a soltar las cargas que nos impiden avanzar.

Levanta tu mirada hacia Dios (Salmos 121:1-2), y verás Su gloria. Aquello que parece imposible, será posible por el poder de Dios. Jesús le dijo a Marta, la hermana de Lázaro, que “si crees, verás la gloria de Dios” (Juan 11:40). Y, efectivamente, Lázaro resucitó, desatado de sus vendas, porque ver la gloria de Dios es ver lo imposible transformarse en posible.

Escucha, presta atención y pide a Dios que te dé entendimiento (2 Timoteo 2:7). Cristo viene, y Él te ofrece libertad. No vivas bajo el peso de la desesperación; el descanso y la liberación están en Su presencia. ¡Sé libre en Él!

Escrito Febrero 2025 El que tiene oídos para oír. Oiga lo que el Espíritu Santo dice a la Iglesia. ¿Quienes están cansados? Generalmente están cargados de opresión y yugos, esto lleva a vivir bajo sometimiento a la fuerza y nadie puede ser libre en esa condición es una vida de prisión. Preocupaciones son cargas que no dejan levantar tus manos para usarlas como señal de victoria en tu vida, el yugo es un peso que dobla tu cuello para que no veas que en el camino de la vida hay una esperanza (Juan 14:6). No tienes que decir que todo acabó esto acobarda y es motivo para rendirse en la vida. La carga puede ser quitada de tu hombro y el yugo se pudre de tu cuello porque hay esperanza=unción=poder de Dios (Isaías 10:27). Venir a mi todos los que estáis trabajados=cansados y cargados, y yo os haré descansar (Mateo 11:28). Ustedes viven siempre angustiados y preocupados, vengan a mi y yo los haré descansar. Vuelve a Dios es quien te puede ayudar ¿como? Obedeciendo su consejo que está escrito en su PALABRA. Cuida tu corazón, no lo llenes de preocupaciones será motivo que no podrás creer para obedecer (Lucas 21:34). Echa sobre Jehová tu carga y él te sustentará (Isaías 55:22). Jehová te detiene, sostiene pero echa de ti ese estilo de vida que te convenció que es así como debes vivir oprimido, desesperado, Abraham dejó la carga y subió al monte. Entonces dijo Abraham a sus siervos: Esperad aquí con el asno. Y yo y el muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros (Génesis 22:5-13). Gente cargada no puede subir al monte=bendición, Alza tu mirada (Salmos 121:1-2). Y verás la Gloria de Dios, todo aquello que parece imposible se hace posible eso es Gloria. Lo que es imposible para los hombres, es posible para-Dios (Lucas 18:27). Jesús le dijo a la incredulidad de Marta hermana de de Lázaro que había muerto ¿No te he dicho que se crees, veras la gloria de Dios? Jesús clamó a gran voz ¡Lázaro ven fuera! Y él que había muerto salió atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario=paño. Jesus les dijo: Desatadle y dejadle ir (Juan 11:40-44). Esto es ver la Gloria de Dios. Presta atención y Dios te dé entendimiento en todo. 2 Timoteo 2:7 Cristo viene, sé libre.