UNA VIDA CON PROPOSITO
Jeremías 29:11 declara, porque yo se los planes que tengo para ustedes dice el Señor, planes de bienestar y no de mal, para darles un futuro y una esperanza.
Desglosando la frase inicial, podemos ver que la palabra “Vida” según la Real Academia Española, representa el hecho de estar vivo. Por otra parte, la Palabra de Dios, define la vida natural como neblina que se aparece por un poco de tiempo y luego desaparece o se desvanece. Sin embargo, en las sagradas escrituras podemos encontrar que el sentido de la vida, conforme a los estándares de Dios significa conocer a Jesucristo, quien ha sido enviado para nuestra salvación y vida eterna y por lo tanto conocer al único y verdadero Dios (Juan 17:3).
Continuando con la palabra “Propósito” podemos encontrar que la Real Academia Española, la define como un objetivo que se pretende conseguir. A diferencia, la biblia especifica que los propósitos de las personas deben alinearse al plan de Dios para cada uno, ya que somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras.
En resumen, podemos concluir qué, según el conocimiento natural del hombre, una vida con propósito sería el hecho de estar vivo, llevando a cabo metas y objetivos personales. En contraste, basado en lo que Dios ha establecido en su Palabra, conforme a su sabiduría, una vida con propósito es conocer al Señor Jesucristo, por quien fuimos creados, y llevar a realizar las buenas obras para las que fuimos diseñados.
Como creyentes, es muy importante reflexionar sobre la vida que estemos llevando. En que estamos invirtiendo nuestro tiempo y que visión estamos creando a futuro. En la biblia podemos encontrar un versículo clave para esto; 2 Corintios 13:5 dice que nos examinemos si estamos en la fe y que nos probemos a nosotros mismos porque es necesario estar fuertes y orar por nuestra perfección. También en Mateo 6:33 nos aclara que es mejor poner primeramente al reino de Dios y todo lo demás vendrá por añadidura.
Meditando en las escrituras, orando en el espíritu y asistiendo a tu iglesia local, podremos ir entendiendo los designios de Dios para nuestras vidas.
Aunado a esto, tenemos en la Palabra, algunos versículos muy claros que describen como someterse a los planes de Dios:
Isaías 43:7 Creados para Gloria de Dios, fuimos hechos y formados.
Santiago 4:8 Debemos tener una relación con Dios, buscando más y más a Él
Eclesiastés 12:13 Honra a Dios y guarda sus mandamientos.
Mateo 22:37,38 Ama ala Señor con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente, este es el primero y más grande mandamiento.
Proverbios 3:6 Reconócelo en todos tus caminos y el enderezara tus veredas.
1 Corintios 10:31 Así como comes o bebes, o haces otra cosa, hazlo todo para la Gloria de Dios.
Salmos 8:6 Señorea sobre las obras de sus manos, sobre toda la naturaleza que por él fue creada.
Por último pero no menos importante, podemos encontrar en Efesios 1:6 que nuestra propia existencia alaba a Dios, siendo adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, nuestro Señor.
Maricela Maldonado.
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