¿A quién le estás creyendo: a Dios o al diablo? 👂⚔️

El que tiene oídos para oír, oiga lo que el Espíritu Santo dice a la iglesia. 

📅 09 de junio de 2025
Pastor Asociada Mireya San. 

Vivimos en una constante batalla por nuestra mente. Cada día recibimos pensamientos, ideas y sugerencias, pero… ¿alguna vez te has detenido a preguntarte de dónde vienen? ¿Estás creyendo lo que Dios dice o lo que el enemigo quiere hacerte creer?

🙌 Dios es verdad, el diablo es mentira 😈

La Palabra es clara: Dios es verdad y el diablo es padre de mentira (Juan 8:44). El enemigo trabaja sutilmente en la mente del ser humano. No solo lanza pensamientos, sino que crea conversaciones internas que pueden parecer inofensivas, como ocurrió en el Edén.

Eva fue engañada por la serpiente no porque fuera ignorante, sino porque no cortó la conversación. Ella no se apartó de lo que parecía solo una charla curiosa. El diablo obtuvo lo que quería: acceso a su mente, y desde ahí sembró una idea destructiva.

💔 El costo de creer una mentira

Esa idea que Eva aceptó trajo consecuencias graves. Al actuar conforme a esa mentira, se destruyó a sí misma, afectó a su esposo y rompió la armonía del primer matrimonio. Por haberle creído al enemigo, trajeron destrucción también a sus hijos (Génesis 4:1–2). La envidia de Caín lo llevó a matar a su hermano Abel (Génesis 4:9–11), y el dolor golpeó el corazón de sus padres.

Eva reconoció más tarde: “La serpiente me engañó” (Génesis 3:13). Pero el daño ya estaba hecho.

🧠 El enemigo sigue usando la misma estrategia

El apóstol Pablo advierte:
“Temo que, como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos (la mente) sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo” (2 Corintios 11:3).

No debemos ignorar esta verdad: las consecuencias no vienen sin causa (Proverbios 26:2). Cuando damos lugar al enemigo, cosechamos los frutos de haber creído una mentira.

🙅‍♂️ No es Dios el culpable

Muchas veces, cuando enfrentamos conflictos en el hogar, en el matrimonio o con nuestros hijos, nos preguntamos: “¿Por qué Dios permitió esto?”. Pero Dios no es el responsable de las consecuencias de haber creído una mentira.

Eva vio su vida desmoronarse. Vio el sufrimiento de su esposo, la pérdida de su hijo, el dolor familiar (Génesis 3:16–17). Todo comenzó por prestar oído a una voz equivocada.

👀 ¿Qué estás oyendo hoy?

La carta de Santiago es contundente:
“Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni Él tienta a nadie” (Santiago 1:13).

Dios no es el origen de tus pruebas ni tus tentaciones. Esa es otra mentira que el enemigo quiere sembrar para dañar tu fe.

🎯 Decide hoy a quién le vas a creer

Hoy tienes una decisión frente a ti:
¿Vas a seguir creyendo las mentiras del enemigo o vas a alinear tu corazón con la verdad de Dios?

✅ Corrige tu corazón.
❌ Deja de engañarte.
💖 Permite que tu corazón tenga una relación real y profunda con la Verdad (Juan 8:32).

🔍 Busca la verdad y escúchala 🎧

No dejes que la serpiente destruya tu mente. 🐍
Corta toda amistad con la mentira.
Renueva tu pensamiento conforme a la Palabra (Romanos 12:2).

🧠 Presta atención, y que Dios te dé entendimiento en todo (2 Timoteo 2:7).

⏰ Cristo viene ya! ✝️🔥

El tiempo es corto. La batalla es real.
Pero también lo es la victoria de quienes permanecen en la Verdad.

¡Cristo viene ya!

El que tiene oídos para oír, oiga lo que el Espíritu Santo dice a la iglesia (09/Jun/25).

¿Le crees a Dios o al diablo? Dios es la verdad (Juan 8:44). El diablo trabaja en la mente del hombre por medio de la mentira, la cual es una entidad maligna. La serpiente engañó a Eva; ella no se apartó de la conversación que él inició. De ese modo, el diablo logró sacarle la información que quería, para así implantar en su mente la idea que daría lugar a su plan.

Al obedecer esa idea, Eva se destruyó a sí misma, engañó a Adán y esto trajo consecuencias a su matrimonio. Por creerle al diablo, llevaron destrucción también a sus hijos (Génesis 4:1-2). Caín mató a Abel por envidia, y Abel murió (Génesis 4:9-11). Esto trajo gran dolor a sus padres. Eva dijo: "La serpiente me engañó" (Génesis 3:13). Ella creyó lo que el diablo le dijo.

Pero temo que, como la serpiente con su astucia engañó a Eva, así también vuestros sentidos (mente) sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo (2 Corintios 11:3). La maldición o las consecuencias no vienen sin causa (Proverbios 26:2).

El diablo habla a tu mente, y si le crees y haces lo que te dice, eso traerá consecuencias por haber creído en la mentira. No es Dios el responsable de las situaciones en la casa. Eva vio la desgracia en su vida, en su esposo y en sus hijos (Génesis 3:16-17).

¿Qué estás oyendo?
Cuando alguno es tentado, probado, afligido o atribulado por el mal, no diga que lo es de parte de Dios. Porque Dios no puede ser tentado, probado, afligido ni atribulado por el mal, ni Él tienta a nadie (Santiago 1:13).

Hoy decide a quién le vas a creer. Corrige tu corazón y no te sigas engañando; permite que tu corazón tenga una relación con la Verdad (Juan 8:32). Busca la Verdad y escucha. No permitas que la serpiente destruya tu mente. Corta esa mala amistad (Romanos 12:2).

Presta atención, y que Dios te dé entendimiento en todo (2 Timoteo 2:7).
¡Cristo viene ya!