LA MANERA CORRECTA DE TEMER

LA MANERA CORRECTA DE TEMER


El Salmista dice en el Salmo 118:4 que reverenciaremos y adoremos a Dios, declarando que su misericordia y amor perduran para siempre. Cuando él adora a Dios y habla de sus grandes atributos, su Fe es fortalecida.

Observe algo interesante en el Salmo 118:5. El Salmista nos dice que, en su angustia, él clamo al Señor. Pero no lo hizo antes de  haber adorado y alabado al señor, en el versículo cuatro, por esos grandes atributos a los cuales clama al Señor para que los manifieste en su angustiante situación. Él continúa declarando: " El Señor está conmigo, y no tengo miedo; ¿ Qué me puede hacer un simple mortal ? " (Salmos 118:6). ¿Por qué temeremos? Si el Todopoderoso es por nosotros, y lo es, ¿Qué podrán hacernos meros seres humanos? Definitivamente, necesitamos tomar conciencia de cuan grande es Dios y cuan pequeños son nuestros enemigos en comparación con Él.

Usted puede estar preocupado sobre lo que el hombre le está por hacer. Puede estar preocupado por que el hombre está por echar de su trabajo o porque el hombre no le dará lo que usted necesita. El hombre puede tratarlo injustamente o rechazarlo. Usted puede estar preocupado por lo que el hombre va a pensar o decir de usted. Lo animo a que le dé mas importancia a lo que Dios piensa de usted que a lo que pueda pensar la gente. La Biblia nos dice que no debemos temer al hombre, sino temer a Dios reverentemente y dándole honor. Cuando rehusamos temer al hombre, pero en cambio tememos a Dios reverenciandole y honrandolo. El se mueve a nuestro favor, así que nada que el hombre intente podrá perjudicarnos permanentemente. La gente malvada puede venir contra nosotros por un camino, pero deberá huir delante de nosotros por siete caminos (vea Deuteronomio 28:7).

Por algún tiempo puede parecer que alguien se aproveche de usted. Pero si mantiene sus ojos en Dios y lo sigue adorando y conserva  su conversación alineada con la Palabra de Dios, al final Dios lo recompensará y le hará justicia, porque Él es un Dios de justicia. El ama la justicia y odia el mal obrar. Dios es nuestro vindicador, y siempre hace que las cosas malas obren para bien, si confiamos en Él.

Es necesario que dejemos de preocuparnos por nosotros mismos y echemos todo nuestro cuidado sobre el Señor. Si tenemos nuestra confianza en el Señor, nadie podrá aprovecharse de nosotros, al menos no por mucho tiempo Dios tiene un sin fin de maneras de bendecirnos. Cuando una puerta se cierra. El nos abre otra. ¡Y si no hay puertas, nos fabrica una!

¿Se encuentra usted angustiado o teme a la gente? Entonces, haga lo que dice el Salmista. Primero, concéntrese en la misericordia y el amor de Dios y alientese a sí mismo, sabiendo que Dios está a su lado.

E.R. 💗

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Testimonio: Estaba segura de que Él me iba a sacar en victoria

Testimonio: Jesucristo Nuestro Gran Sanador Dr. Miguel Maldonado.

¿Escudriñas tu Vestidura?