EL QUE TIENE OÍDOS PARA OÍR,
 OIGA LO QUE EL ESPÍRITU SANTO DICE A LA IGLESIA.

No te engañes Dios no puede ser burlado, todo lo que el hombre hace pagará. No te dejes engañar nadie puede burlarse de la justicia de Dios. Cada uno cosechará lo que haya  sembrado. Son tiempos de reflexión y cambiar los malos hábitos. El engaño lo usa el diablo para que no entiendas la verdad y así poder llevarte a que caigas más profundo en lo que te destruya. Está el mundo entero en una guerra de ideas para confundir y apartar a muchos de lo que es Dios. 

David fue un hombre que fue engañado de muchas formas por el diablo, hizo cosas que para el le parecieron que eran buenas y lo llevaron a vivir tiempos muy dolorosos, hasta que le pidió ayuda a Dios y reconoció que estaba sembrando mal con palabras, actitudes y hechos. Llegó el momento que le dijo a Jehová  Dios ten misericordia de mí, tengo culpa, he hecho lo malo ante tus ojos, tienes razón en lo que tu dices, te he ofendido he hecho lo malo en tu propia cara, no puedo decir que soy inocente.

 Puedes estar en esa misma situación y todavía no alcanzas a ver que estás en un peligro muy grave de destrucción y afectas a tu familia y el diablo así quiere que muchos no alcancen a ver ese peligro y hace verte que estás en sufrimiento por que nadie te quiere, ni Dios pero Dios ni la gente tienen la culpa de tu situación, es uno mismo(a) que está sembrando mal, practicando lo malo. 

David pudo ver sus errores y se dirigió a Dios, Reconoció que solo Dios lo podía ayudar y sacar de ese hoyo de desesperación que le causaba depresión, Dios lo rescató de la muerte que es soledad y abandono. David dijo Dios es bueno me llenó de amor y me llenó de vida, de cosas buenas y me levanto como las águilas. Un águila nunca envejece, su plumaje, garras y pico están nuevos, jóven y fuerte. David hasta el último día de su vida estuvo fuerte y lleno de vida, porque cambió su mirada del engaño que es el engaño del diablo y puso su mirada en la verdad que es Dios. Dios te ama no te odia quien te odia es el diablo por eso roba, mata y destruye. David disfruto de riquezas y honor hasta el último día de su vida .

Riqueza empieza por tener a Dios, tener paz es riqueza tener bien a tu familia, es riqueza que no les falta nada en casa, riqueza incluye todo. Dónde está Dios, la verdad no falta nada. David supo que Dios estuvo con él, se duplicaron sus fuerzas, cuando tienes a Dios tus fuerzas se renovarán, tu Fe, tendrás confianza en que todo lo puedes en Cristo y entregarás todo de tí. David cuando supo que sus actitudes y hechos lo tenían mal, juntamente con sus hijos, su trabajo detuvo eso con el arrepentimiento y volver su mirada a Dios ¿Qué te hace falta para arrepentirte? Estás vivo(a) y tienes la oportunidad de cambiar. Dios te ayuda si tu quieres, David quiso y todo cambió hasta el último día de su larga vida.

David también disfrutó de honra, porque cambió su conducta que tenía ante sus hijos y gente; su comportamiento fue otro después que dejó de hacer lo malo ante los ojos de Dios. Hizo uso de la verdad y la escribió en su corazón para no faltar a sus deberes como rey, padre y esposo ¿Cúal es tú conducta ante los tuyos? Si no es buena, puedes cambiar si quieres. Si te molesta que hablen de tí por la mala conducta no te enojes, cambia y disfrutarás como David de la riqueza de tener a Dios, familia, casa y trabajo y disfrutaras también de honor  por tu buen comportamiento. ¿Qué vas a hacer en estos tiempos? Analizate con cuidado, haz Cambios y verás resultados. 

Pastor Asociada Mireya San 



CITAS MENCIONADA:
Gálatas 6:7              2 Corintios 4:4  
Juan 10:10               Salmo 51:1-5
Proverbios 19:3       Salmo 103:4-6
Isaías 40:31             1 Crónicas 29:28
Hebreos 12:2           Filipenses 4:19 
Salmo 23:1              Hechos 3:19-20
Juan 8:32 

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