Una relación con Dios

                                                                                                                                            


A muchas personas les cuesta acercarse a Dios con un corazón sincero, como si Dios no supiera ya lo que está sucediendo. A veces se menosprecia el poder de Dios y se pone en muy bajo estima, cuando en realidad es consecuencia de no conocer verdaderamente quien es Dios. Si no lo conoces, probablemente no puedas tener una relación con él y no puedas conocer su verdad, experimentar su libertad o poder depositar tu confianza en Él.

Te quiero compartir unos consejos para comenzar una relación con Dios o fortalecer la que ya tienes.


o El primer paso es haber aceptado a Jesús en tu corazón y ser ahora un hijo de Dios.


o Abre tu corazón y habla con Dios con sinceridad.



o Deja que Dios restaure tu corazón (Ezequiel 36:26: Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo).

o Deja toda carga y preocupación en Jesús; de esta manera dejas toda distracción a un lado para poner tu entera atención a tu relación con Dios.


o Permite que Dios te libere y te muestre sus planes sin miedo. (1 Juan 4:18: En esa clase de amor no hay temor, porque el amor perfecto expulsa todo temor. Si tenemos miedo es por temor al castigo, y esto muestra que no hemos experimentado plenamente el perfecto amor de Dios).


o Acepta la perfecta voluntad de Dios.


o Siempre ora y medita la Palabra de Dios (Josué 1:8: Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer todo lo que allí está escrito. Solamente entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas).

o No olvides de darle un cuidado especial a tu relación con Dios así como los cuidados que se le dan a una planta; riégala, cuídala, amala y levanta las cosechas.


Teniendo una relación con Dios te ayudara a recibir aún más de Él. Entraras en una paz inexplicable y conocerás cosas misteriosas que no comprendías (Juan 33:3: Clama a mí y yo te responderé, y te mostrare cosas misteriosas que tu aun no conoces), comprenderás el propósito de Dios y siempre tendrás a alguien que te escuche y te respalde. La única desventaja es que ya no abra ninguna excusa para recibir las bendiciones de Dios.

Este es mi mejor consejo para ti: Proverbios 3:5-6 (Confía en el Señor con todo tu corazón; no dependas de tu propio entendimiento. Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar).


 Yirel Pacheco  

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Testimonio: Estaba segura de que Él me iba a sacar en victoria

Testimonio: Jesucristo Nuestro Gran Sanador Dr. Miguel Maldonado.

¿Escudriñas tu Vestidura?