Palabra de Conocimiento -Pr. Ignacio Hughes
Los tiempos vienen, los tiempos vienen, tiempos muy, muy, mas peligrosos de los que has visto. Tiempos muy peligrosos. Muchos apostatarán de la fe. Muchos se alejarán, muchos. Cuando la Biblia habla de apostatar de la fe, está hablando de los hijos de Dios. Muchos de los hijos de Dios se irán al mundo, olvidarán, no guardarán su dignidad. Estarán escuchando falsas doctrinas y otras doctrinas que agradan los oídos, a los oídos humanos, aun de los hijos de Dios. Muchos se alejarán, muchos se irán. La Palabra es ineficaz en la vida de ellos. Muchos, muchos en todo el Cuerpo de Cristo, tus ojos los verán. Tus ojos verán esto que el Espíritu de Dios está hablando. Tus ojos lo verán. Cuida tu corazón y guarda tu corazón. Muchos apostatarán de la fe, se alejarán de la fe. Escucharán doctrinas, doctrinas diversas, porque hay muchas cosas ahorita. La tecnología, el avance y la ciencia vienen de Dios, pero Satanás ha perturbado, ha perturbado, ha perturbado, ha perturbado, ha perturbado y ha trastornado, ha perturbado y ha trastornado.
La ciencia y el conocimiento han ido mas allá, han ido mas allá, han ido mas allá. Mas que nunca el discernimiento espiritual, el entendimiento espiritual es muy importante en estos tiempos. En estos tiempos, en estos tiempos de confusión, en estos tiempos de competencia, en estos tiempos llenos de soberbia y de orgullo. El hombre, el genero humano más que nunca ha caído en el pecado del orgullo, la misma condenación de Satanás, en la misma condenación de Satanás. Por eso algunos se irán, se alejarán. Habrá otros, hay muchos de los hijos de Dios. Dice el Espíritu de Gracia: muchos de los hijos de Dios han sanado- parcialmente, pero todavía tienen que depender de medicina. Algunos de ellos volverán a la enfermedad y otros nunca saldrán. El Señor Jesucristo los recibirá aun antes de tiempo.
Hay muchos que se están metiendo en cosas que Dios no los llamó a hacer, hay otros que están haciendo cosas en el mundo, que Dios no los llamó a hacer. La distracción, la distracción en tantas cosas que hay el día de hoy. Muchos de los hijos de Dios han caído en distracciones. Caminan, por un lado, de la mano de Dios; por el otro lado, caminan en las cosas del mundo. El mundo les atrae, el mundo les llama. Han puesto su mirada, algunos, en sus medios financieros, otros en sus cuerpos, otros en sus inteligencias. La gran mayoría de los hijos de Dios no están escuchando lo que el Espíritu dice, no están poniendo atención. No disciernen. Competencia, engaño del diablo, soberbia, ofensa, desanimo, falta de confianza, falta de creer. Grandes puertas se han abierto a Satanás, en las naciones. Dios no es importante en la vida de- en la vida, en la vida de los hijos de Dios; no pienses que va a ser importante en la vida del mundo. Si no es importante para tu vida no es importante para el mundo. Pero escrito está: Los hijos de Dios son la luz del mundo, son la sal de esta tierra. Pero el mundo los ha influenciado,
y vendrá en aumento, en aumento, en aumento, en aumento, en aumento y en aumento.
Escucha lo que el Espíritu dice, escucha lo que el Espíritu dice.
Nuevas plagas, nuevos nombres, nuevas enfermedades estarás escuchando en un futuro. Nuevas cosas, mayores rumores de guerras y habrá nuevas guerras, en todo el mundo. La maldad y la oscuridad irán de aumento en aumento, de aumento en aumento, de aumento en aumento. ¿Pero que hay del mundo? El mundo es llamado el reino de las tinieblas, el mundo opera en el reino de las tinieblas. ¿Pero que hay de los hijos de Dios? ¿Qué hay de los hijos de la Luz? ¿Qué hay de los hijos del Reino? ¡Oh yeah! Muchos caerán, muchos se alejarán; porque hay un dominio de Satanás en sus mentes, hay un dominio. Ellos dicen: no, no puedo salir de esto, o es imposible. Oh, es que es, todo esto es normal. Es normal que me sienta así, es normal que me sienta de esta manera. Has olvidado, has olvidado, has olvidado y no has puesto atención a tu naturaleza divina. Has olvidado que tus orígenes están en el espíritu, en el Espíritu de Dios, en el espíritu humano.
A diario, a diario, a diario, a diario nos enfrentamos a diariamente, en nuestra sociedad, en esta sociedad, a diario, a cosas contrarias a la Palabra de Dios. Tu lo verás, tus ojos lo verán. Muchos apostatarán, en todo el mundo, en todo este planeta, muchos apostatarán. Muchos se enfermarán, muchos volverán a enfermar. ¡Oh! ¿Pero que hay de aquellos? Hay un remanente, en todo este planeta, en esta creación de Dios, hay un remanente que ha puesto en su corazón, el seguirme, dice el Señor, el honrarme, el permanecer, el oír mi palabra, el moverse de acuerdo con mi voluntad y a lo que está escrito. Y no moverse por lo que oyen o por lo que ven. Hay un remanente. Pero, tu verás, a esos, a esos hijos de Dios prosperar, prosperar, prosperar; seguir adelante. Envejecerán-envejecerán, en el Reino. Envejecerán en las cosas de Dios. Envejecerán amándome, sirviéndome, honrándome; e irán, en esta tierra, de victoria en victoria. En medio de la oscuridad serán luz. En medio de la escasez serán prósperos. En medio de la enfermedad verán sanidad en sus cuerpos y en los cuerpos de otros. Yeah, gloria, yeah, yeah, aleluya. ¡Gloria a Dios!
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