EL BUEN PLAN DE DIOS.



El plan de Dios para nuestras vidas fue establecido en el reino espiritual aún antes de la fundación de la tierra, y es un buen plan, como vemos en Jeremías 29:11 "Porque yo se muy bien los planes que tengo para ustedes afirma el Señor, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza."

El Salmo 139:16 nos dice que antes de que hubiéramos nacidos. Dios había planeado nuestros días. sin embargo. Satanás ha trabajado duro para destruir el buen plan del Señor en muchos de nosotros, y a tenido un alto porcentaje de éxitos. 

Dios envió a su hijo, Jesús. Para redimirnos y restaurar todas las cosas a su correspondiente orden. Él escribió su voluntad para nuestras vidas, y cuando la creemos, literalmente, comienza a convertirse en realidad.

Algunas personas creen que por un gran número de cosas, pero ven muy pequeñas manifestaciones de ellas. Quizás la razón es porque lo creen. Ellos pueden ver algunos resultados de su fe, pero no los radicales resultados que experimentarían si dejaran que sus bocas fueran junto con sus corazónes en el servicio de Dios (vea Romanos 10:-9-10).

Algunas personas están tratando de vivir en las bendiciones del Señor mientras siguen hablando como el diablo. No debemos cometer ese error. No veremos resultados positivos en nuestras vidas diarias si hablamos cosas negativas.

Debemos recordar que estamos llamando y clamando. Estamos extendiéndonos hacia el reino espiritual y trayendo hacia nosotros cualquier cosa acorde con nuestras palabras. Podemos extendernos hacia el reino de Satanás, el reino de las maldiciones. Y traer hacia nosotros cosas malas y negativas. O podemos extendernos hacia el reino de Dios, el reino de las bendiciones, y traer hacia nosotros cosas buenas, positivas y grandiosas. Las palabras son como recipientes; Traen poder creativo o destructivo.

E.R.

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