UNA PERSONA CON PROPÓSITO

UNA PERSONA CON PROPÓSITO.

Isaias 14:26-27 nos dice que Dios es un Dios de propósitos. y que cuando se propone algo eso sucederá.

Jesús conocía su propósito. Como sabemos según Juan 10:10, Él dijo que vino al mundo para que tuviéramos vida. En Juan 18:37, le dijo a Pilato: "Yo para esto nací, y para esto vine al mundo: para dar testimonio de la verdad". Juan escribió que el propósito de Jesús era destruir las obras del diablo (vea 1 Juan 3:8).

Si no tomamos un propósito en nuestra vida, nos sentimos inútiles sin valor y frustrados. De modo que es muy importante que comprendamos que Dios nos a diseñado con un propósito en mente (vea Salmos 139:16). En general, Él desea que nos divirtamos y disfrutemos la vida que nos dio. Pero en cuanto a nuestro propósito especifico, varia de individuo a individuo, y de una época de la vida a la siguiente así que debemos buscar para descubrir cual cual es.

Ahora mismo puede estar en un tiempo de transición de una época a la siguiente. Si es así, no se desanime. Dios le mostrara lo próximo que tiene para que usted haga. A veces pueda que salir e intentar algunas cosas hasta aquello con lo que está cómodo . Pero puede estar seguro de que sea lo que fuere, usted tiene un propósito, y nunca se sentirá satisfecho hasta que lo encuentre y comience a fluir en él.

No solo es necesario que conozcamos nuestro propósito, es necesario que lo hagamos "a propósito". Esto implica tomar decisiones para vivir rectamente. Tenemos que amar a propósito.

No amemos porque tenemos ganas; amemos porque nos proponemos hacerlo así. El amor no es un sentimiento sensiblero que tenemos por la gente; es una decisión que tomamos  sobre como relacionarnos con las personas. El dar también es una decisión. No damos simplemente porque tenemos ganas de dar. Damos porque estamos convencidos de que es lo que Dios desea que hagamos. Damos a propósito y con un propósito.

Lo mismo es verdad en cuanto hacer misericordioso, amable y andar en el Espíritu. Hacemos esas cosas no necesariamente porque tengamos ganas, sino porque somos llamados a hacerlas. Amor, gozo, paz,paciencia, benignidad, bondad, y todas las otras manifestaciones del fruto del Espíritu son características del Espíritu Santo que vive dentro de nosotros cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador y podemos desatarlas si lo hacemos a propósito. Tome la decisión de dejar fluir a través de de su alma y cuerpo las cosas buenas que Dios a colocado en su espíritu, para que otros puedan ser bendecidos y Dios sea glorificado.

Nuestra carne no siempre va a estar de acuerdo con nosotros para hacer estas cosas. Pero debemos elegir amar a propósito, dar a propósito, y permanecer en paz a propósito. Si queremos tener paz, debemos proponernos tener paz, porque el diablo tratara de robárnosla.

Es necesario que todo lo que hagamos por los demás, y todo lo que hagamos en la vida, sea hecho a propósito. ¡Pídale ayuda a Dios para transformarse cada vez más en una persona con propósito!










Comentarios

Entradas más populares de este blog

Testimonio: Estaba segura de que Él me iba a sacar en victoria

Testimonio: Jesucristo Nuestro Gran Sanador Dr. Miguel Maldonado.

¿Escudriñas tu Vestidura?