EL QUE TIENE OÍDOS, PARA OÍR; OIGA LO QUE EL ESPÍRITU SANTO DICE A LA IGLESIA.
¿Quieres ver días buenos? Empieza a restaurar tu vida y familia. Haz el bien en tu casa y a tu familia; el amor de Dios se derramó para que extiendas perdón. Cuando usas el amor de Dios eres libre del rencor y el odio que tanto mal causa en la relación de padres e hijos. No es el tiempo para vivir en un ambiente de maldición, ahí no está Dios y hoy más que nunca necesitamos acudir a la cobertura de Dios. Para arreglar todo asunto personal, matrimonial, familiar se empieza por perdonar, nada podemos hacer o recibir de Dios si no perdonas.
Habla bendición a tu familia, no la destruyas con palabras mal dichas. En bendecirte hay victoria.
Empieza a tener comunicación familiar, no los dejes fuera porque puede venir el león=diablo y acabar con ellas espiritualmente, emocional y mentalmente, y tu no haces nada por sacarlos de la depresión causada por tantas palabras ofensivas. Palabras vienen de la mente, ahí es el trabajo del mal. Estás viendo a tus hijas ausentes de todo, no sigas más justificando que así es su comportamiento, por algo será. Busca las buenas palabras, por eso es bien importante perdonar para que puedas bendecirles. ¿Amas de verdad a tu esposo(a) e hijas? Si amas vas a extender perdón y amor, vas hacer que la situación en que vives cambie.
Hijos asumen que sus padres no les amen por sus palabras ofensivas. El padre del ex hijo pródigo lo perdono, olvidando que su hijo se fue de la casa, le pidió el dinero para malgastarlo, dinero que le costó trabajar al padre, y se fue lejos a vivir queriendo decir que entre más lejos de su padre mejor. El hijo un día entendió lo mal que hizo y lo primero que dijo para restaurar su vida, su relación con su padre fue: "Iré a mi padre y le diré he pecado contra Dios y contra tí, perdóname"; en ese momento el padre extendio el perdón a su hijo, no le hecho en cara lo que hizo, ni porque malgasto todo el dinero, solo dió el perdón.
Cuando se perdona de verdad, ese asunto no se vuelve hablar, ni recordar. Cuando es de corazón solo entiendes que Dios te ama, tanto, tanto que perdono toda ofensa y que ahora eres feliz, viviendo en paz, porque hubo perdón para ti, y ahora ya no hay tiempo en ti para recordar la ofensa, ahí es cuando se empieza aprovechar el tiempo para vivir en la Bendición de Dios que enriquece y no trae tristeza con ella.
No perdas el tiempo, si puedes empezar a vivir en familia. El ex-hijo pródigo llego a casa, fue perdonado ahora amaba más a su padre quería estar con el e ir a todas partes. ¿Tus hijos quieren estar contigo e ir contigo a todas partes?
Dios te ha dado Bendición de tenerles, no les dejes que vivan desubicados; lo puedes hacer ubicandote en Dios poniendo tu corazón y mente en Él, y así podrás aprovechar y ayudales espiritualmente y mentalmente. Sana su corazón y mente, para que sea una familia que esté fuerte en unidad, cierra la puerta por donde entran los problemas y enfriamiento espiritual.Vuelve al abrigo de Dios que brinda auxilio, protección, amparo y refugio. Tus hijas piden refugio en medio de la soledad y enojo. Hablales, quita las cenizas del pasado de tu mente, perdonate y perdona para que puedan avanzar. Que tu casa se llene de amor y tu pensamiento esté en paz, Que te sigan el bien y la misericordia. Presta atención y Dios te dé entendimiento en todo.
Pastor Asociada Mireya San.
CITAS MENCIONADAS:
Deuteronomio: 28:45 Salmo 127:3
Marcos 11:25 Mateo 5:23-24
Salmo 23:6 2 Timoteo 2:7
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